Pero también he de celebrar que hoy se me ha otorgado un didgeridoo de grandes proporciones, me encanta, es enorme y pesa una tonelada, como yo.
Lo he limpiado por dentro y ahora tengo que hacerle los roces a mi diafragma y pulmones porque esa bestia es muy dura de domar, el día que lo haga sonar tan natural como sus hermanos pequeños organizaré tal fiesta didgeridoo que la tierra se estremecerá.
Aquí os dejo "La Canción" de "El grupo".
Si me gusta mucho el metal, y me gusta mucho el Didgeridoo... pues....
bueno gente, como dice vicente, ¡viva el software libre y su puta madre!.
Nos vemos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Charlemos.